Women's National Team Embarks on Second Year at IIHF Women's Development Cup. Win First Game against Brazil 6-0!

Day one in Argentina was more than just hockey for Puerto Rico’s women’s team — it was about growth, connection, and proving what’s possible when passion meets opportunity.

The women arrived in Buenos Aires and hit the ice first thing with a practice, then the goalies had a specialized IIHF clinic to go on to play Brazil that evening and win 6-0 in their first game of the series.

"El primer día en Argentina fue más que solo hockey para el equipo femenino de Puerto Rico; se trató de crecimiento, conexión y demostrar lo que es posible cuando la pasión se encuentra con la oportunidad.

Las chicas llegaron a Buenos Aires y fueron patinando pa' la pista a practicar. Después, los porteros tuvieron una clínica especializada de la IIHF. Terminaron ganándole 6-0 a Brasil en su primer juego de la serie, ¡wepa!

Puerto Rico’s goalies trained side by side with players from other nations. It wasn’t just drills and saves — it was a moment of solidarity, of realizing that women’s hockey is building something bigger than any single team. Every glove save and every tip from the coaches carried the spirit of development and shared progress.

"Las porteras de Puerto Rico entrenaron codo a codo con jugadoras de Argentina, Brasil y Colombia. No fue solo ejercicios y paradas, fue un momento de pura hermandad, ¡dándose cuenta de que el hockey femenino está construyendo algo más grande que cualquier nación! ¡Un espíritu de unidad, desarrollo y progreso que te llega al alma!"

Estela Vazquez and Kaylee Awrachow in their IIHF Debut for Puerto Rico.

When the puck dropped against Brazil, Puerto Rico showed the world that they belong here. With determination and teamwork, they skated to a commanding 6–0 victory. Every goal was more than a number on the scoreboard — it was a symbol of resilience, of countless hours of practice, and of the dream to represent their island with pride.

En el juego contra Brasil, Puerto Rico le demostró al mundo que llegaron para quedarse. Con ganas y puro juego en equipo, patinaron pa' una victoria 6–0 que dominaron de principio a fin. Cada gol fue más que un número en la pizarra; fue un símbolo de aguante, de pila de horas dándole duro en la práctica, y del sueño de representar a su isla con orgullo.